LEGIO VIIII

Hispana

                        Guía práctica del legionario

                    Recomendaciones de equipamiento de la Legio VIIII Hispana

 
      Esta guía no es un catecismo absoluto, sino como un elemento de consulta y referencia. Aunque hay otros elementos que pueden ser admisibles para recrear una legión romana de la época augustea, la Legio VIIII Hispana posee unas piezas de referencia que cada miembro que quiera apuntarse a ella deberá adquirir por su cuenta. Cualquier compra que se haga fuera de las recomendaciones de esta guía ha de ser consultada a la comisión que la ha elaborado, a través de su responsable, el prefecto militar.


 

      Elementos del ejército romano tardorrepublicano

FOCALE.
Pañuelo de unos 140 x 40 centímetros que protege el cuello de rozaduras con la armadura. Será preferiblemente de lino o lana, aunque no se rechaza el algodón. Esta prenda será proporcionada por la Legio ya que ha de ser del mismo color y tamaño, como un elemento identificativo del grupo.
TÚNICA.
La Legio VIIII utiliza el color rojo y el crudo. En cuanto al material, se recomienda la lana o el lino. Se deja a libre elección la existencia de mangas en esta prenda. El largo de la túnica debe ser por encima de las rodillas (medir sin ceñir previamente el cinturón), para diferenciarla claramente de la túnica civil.
BRACAE.

Especie de pantalones que llegan por debajo de la rodilla. Se recomienda su uso en invierno. En caso de que vestir bracae, serán de colores marrones o pardos, de forma que la variedad de colores no la haga una prenda estridente.

 

SUBARMALIS.

     Pieza basta que se colocaba bajo la armadura y amortiguaba su peso y los golpes durante el combate. Su uso no es obligatorio, aunque esta comisión lo aconseja para mayor protección de golpes y roces.
    Su elaboración se deja al criterio de cada legionario. No obstante se aconseja que se utilice el fieltro forrado de lino, haciendo hincapié en la necesidad de reforzar la parte de los hombros por razones obvias.
   Se deja libertad para aquel que lo quiera hacer de cuero. No es muy común, pero tampoco es rebatible en absoluto. En cualquiera de los casos el subarmalis puede llevar añadidos flecos que asomaban por debajo de la cota sobre los hombros y alrededor de la cintura (pteruges).

Subarmalis confeccionados por miembros de la Legio VIIII

Referencias:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

CASCO.

   Independientemente que haya otros modelos que están dentro de la época que queremos reconstruir, se recomienda a los legionarios el uso del montefortino o el coolus. Este último en sus variantes buggenum, coolus C y haltern. El gálico A también es aceptable. Están fuera de época los coolus E y G, por lo que los legionarios equipados con dichos modelos deberán cambiarlo antes de 2010.

Montefortino Coolus - Buggenum Coolus C Coolus D - Haltern Gálico A
    Se recomienda el montaje de un penacho de pelo de caballo, a ser posible de color negro. Este adorno puede colgar por la espalda, pero se aconseja que no sobrepase el omóplato, para que no estorbe los movimientos
Referencias:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

CINGULUM

   Los legionarios de tiempos de Augusto solían llevar dos cinturones. Sería correcto el  uso de uno o dos cinturones estrechos (no más de tres centímetros de ancho). Estarán decorados con placas de latón o bronce. Estas placas pueden tener motivos de decoración distintos. No todos son correctos para la época que recreamos. Por tanto se consultará a la comisión militar acerca de le decoración de dichas placas. Adjuntamos algunos ejemplos válidos:

Referencias:

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

CALIGAE

El calzado militar romano por antonomasia eran las caligae fuertes sandalias de cuero con clavos en la suela. Las caligae más correctas son las encontradas en Comaccio, que presentan unas tiras de cuero más finas que las que calzan los grupos actuales. No obstante dado el esfuerzo y costo que supone hacerse con unas, se admitirá las actuales de tiras más anchas por ser más resistentes. En cuanto a los clavos de la suela, se deja a recomendamos que no sean de cabeza plana dado su poco agarre en el pavimento.

Referencias:
GLADIUS.

    La espada de la Legio VIII será de los modelos mainz o hispaniense tardio.*

Referencias:

PUGIO.

    El mercado ofrece una reducida gama del característico puñal del legionario. Dada su escasa oferta, nos vemos obligados a conformarnos con lo que los fabricantes ponen a nuestra disposición. Muy correcto seria el modelo Titelberg pero es extremadamente difícil encontrarlo actualmente. *

Referencias:

PILUM.

El legionario ira armado con dos jabalinas pesadas, llamadas pilum. Una de ellas es más ligera que la otra. Esta comisión da preferencia a la fabricación del pilum pesado, más vistoso que el ligero, aunque recomienda la posesión de ambos ya que el ligero es más recio y resistente a la hora del lanzamiento.

El pilum pesado está compuesto de un asta de madera de unos 25 o 28 milímetros de grosor, rematada por una pieza troncocónica donde irá encastrada mediante una lengüeta, una fina pieza metálica de unos 60-70 centímetros de longitud. Dicha lengüeta estará sujeta al troncocono por medio de dos pasadores. La base de esa pieza troncocónica estará a la altura de la mano, cuando el brazo se dobla en ángulo recto.

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Pilum pesado (arriba) y ligero (abajo).

     La discusión sobre el pilum en el foro de Hispania Romana, está aquí: http://legioviiii.foros.ws/t1656/pilum/

Referencias:

SCUTUM.

    La Legio Nona va equipada con escudos ovalados basados en las medidas del encontrado en Al-Fayum (120x75 centímetros), curvos, con el borde de latón y con umbo semiesférico. Dada la escasa documentación existente sobre la decoración de los escudos hemos decorado los nuestros con motivos relacionados con el origen de la Regio VIIII Hispana: optamos por los hipocampos (caballos con medio cuerpo en forma de pez) dado que en un principio esta legión la constituyeron miembros procedentes de la flota. Las medias lunas se eligieron debido a que era el símbolo preferido de Julio César; la corona de laurel, por el sobrenombre de triumphalis ganado en la campaña de Grecia.

El escudo va equipado con un umbo ahusado que abraza la nervadura central del escudo (spina).

En la parte inferior hay sendas placas (tabulae), a derecha e izquierda de la spina. En ellas se escribirá el nombre de la legión y la cohorte. Asimismo, en la parte posterior del escudo el legionario pondrá su nombre para distinguir su escudo.

Referencias:

ARMADURA.

    La protección corporal del legionario es una cota de malla (lorica hamaca), de origen celta, confeccionada con anillos de hierro de 6 u 8 milímetros de diámetro, enlazados en filas alternas de anillos cerrados y remachados. La cota no tiene mangas o, si las tiene, muy cortas. Lleva sobre los hombros una protección en forma de U, forrada de cuero en su parte inferior. Esta pieza se ancla a la espalda con una fila de anillas. También se sujeta al pecho con ganchos en forma de “cisne” o tira rígida de latón. La cota debe quedar por encima de medio muslo. Dado el costo que actualmente supone la adquisición de este tipo de cotas se admitirá la que de anillos cerrados exclusivamente.

Referencias:

IMPEDIMENTA

     Desde la reforma de Mario, el propio legionario lleva su equipo y todo aquello que le es necesario necesario para su alimentación y aseo. Todos ello se transportaba en un hatillo llamado furca, compuesta por dos palos atados en cruz, de la que se suspendían todos los elementos.

Junta de los travesaños de la furca (izquierda) y sarcina (centro) y furca (derecha).

   En la sarcina (bolsa de cuero) se meterán los útiles de aseo, así como túnica de repuesto, el subligaculum, los calcetines (udones), el plato y los cuchillos. Atados al travesaño irán, la capa (sagum o paenula), la cantimplora para el aceite y la pátera.

  Así mismo, cada legionario debía llevar dos estacas de empalizada y, a veces, otro tipo de herramientas (palas, picos, hachas...).  Al larguero de la furca, de forma cómoda para la marcha, llevará atados los dos tipos de pilum. Se recomienda encarecidamente que cada legionario se equipe con este elemento, indispensable para las marchas y la práctica de la arqueología experimental.

 

Referencias:

oooo OOOO oooo

Esta guía no quiere ser exhaustiva en recomendaciones sobre el equipamiento para no resultar engorrosa. No obstante consideramos que es suficientemente completa para despejar las dudas que se tengan sobre la confección o adquisición del equipo.

Sin embargo entendemos que en el mercado existe tal oferta que pueden surgir dudas sobre la correcta obtención del equipo. Es por eso que recomendamos la consulta de esta guía o, si se sale de ella, a la Comisión Militar, creada para que el grupo sea lo más homogéneo dentro de su diversidad.

* Queda totalmente prohibido llevar afiladas las armas de exhibición.

Infringir esta norma no sólo supone quedar fuera de la cobertura del seguro contratado de Responsabilidad Civil, sino que además es un peligro para todos y una infracción de la Ley que puede acarrear a la Asociación sanciones administrativas y la requisa “in situ” de dichas armas

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

3 Febrero de 2010